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Capítulo 3 - Atrapar la Mente de tu Mujer: Los toques




Toca, mira, di, muévete.
Hazlo con intención.

Repasemos la lista de toques, no sin antes recordar que son más cosquilla que caricia, pues su objetivo es romper una dinámica mental no apropiada de tu mujer y capturar su mente para llevarla por donde sientes que le acerca más al mayor placer en cada instante

Deben ser cosas raras, porque si haces lo habitual no encontrarás la respuesta que buscas en ella, sino la de siempre. Y breves y cuidadosos. Pero no es necesario que prescindas totalmente de lo habitual, sino que lo uses en principio de forma secundaria. 

Céntrate ahora en los toques. Estos son sólo ejemplos ilustrativos que yo uso, pero puedes hacer tus propios toques si te funcionan. Pon intención, si tú no sientes lo que estás haciendo, ella tampoco; si lo sientes, se sintonizará con lo que tú sientes.



Toques físicos con intención: (puedes hacerlo con una sola mano o ambas, pero preferentemente una, no hay que hacerlos todos en una sesión, sólo los necesarios)

· Yema del dedo pulgar sobre las costillas (hacia el costado) o el abdomen.

· Tirón de la piel del abdomen.

· Presión de un pezón entre las falanges más próximas a la palma de la mano de dos dedos, con la mano en supinación (palma arriba).

· Pellizco en el costado o en el abdomen.

· Todo el pulgar contorneando la última costilla flotante.

· Apoyo de cada dedo uno tras otro como si tamborilearas sobre una superficie para hacer “música”.

· Uno o ambos índices en los costados de su abdomen como para hacerle cosquillas.

· Apoya todo el pulgar en su ingle.

· Haz un toque con una mano y otro diferente con la otra (no es tan difícil como parece al leerlo) a la vez o casi a la vez.

· Tirón del vello púbico.

· Arañazo.

· Etc.


Toques visuales y gestuales con intención:

· Mírala a los ojos un momento mientras haces el toque, el movimiento atrapamentes o inmediatamente después, y piensa: “Lo has sentido” o “Bien” (No lo dudes, mira con seguridad. Si fallas, sonríe con picardía masculina y haz otra cosa con más seguridad).

· Guíñale un ojo y sonríe levemente como si le preguntaras: “¿Lo sientes, verdad?” Observa un instante su reacción y haz otro movimiento mientas piensas: “Pues toma más placer”.

· Mírala a los ojos con cierta picardía masculina y suspense entornando los ojos y dirige lenta y conscientemente tu mirada al lugar en el que vas a hacer el toque.

· Etc.


Toques verbales con intención: (Nada de charletas)

· Bien (Si sientes que te sigue)

· Toma (Para que te siga)

· Toma más (Si sientes que te sigue)

· Mmmmm (En ambos casos)

· Uaaaa (En ambos casos)

· Disfruta (En ambos casos)

· ¿Qué? (Si sientes que te sigue)

· Te gusta (No preguntando, sino afirmando, si sientes que te sigue)

· Shhhhh (En ambos casos)

· Etc.


¿Cómo aplicarlos?

No entres a lo loco ni de cualquier manera en el cuerpo de tu mujer, si empiezas mal, crearás una predisposición negativa en su mente. Sé consciente tú para que ella sea consciente de la penetración (la dichosa empatía). Puedes hacer un toque simple o combinado antes de entrar en ella. Sigue moviéndote muy pendiente de ella. Si se distrae o no responde a cada uno de tus movimientos, toca y observa un breve instante. ¿Atrapaste su mente por un instante? ¿Rompiste la monotonía de su ritmo? Aprovecha para hacer un empujón o una retirada plenamente conscientes y haz un toque verbal. 

Sigue moviéndote conscientemente si notas que ella siente cada movimiento tuyo. No hagas ni un solo movimiento mecánico o embrutecerás su sensibilidad y retornará al hábito de frotar hasta acabar.


Bueno, vale por hoy, contadme vuestros progresos y si las hay, las dificultades y dudas. Próximamente repertorio de toques de empuje y retirada para acompasar con los anteriores.





Capítulo 10 (y 2) - Ora(l) et Labora: Los Toques Orales en el sexo femenino


En esta segunda entrega del Sexo Oral Cienorgasmológico vamos a hacer una recopilación de los toques orales más eficientes de cara a proporcional la máxima satisfacción a la mujer. Empezaré por volver a recordar que hay que olvidarse de la lengua no porque no deba usarse, sino porque abusar de ella limita la aplicación de otros toques más eficientes. Recuerda también que en todos los toques orales hay que poner intención en lugar de hacerlos mecánicamente: o lo haces con firme consistencia mental del propósito que buscas o le harás cosquillas, le dará la risa y a ti se te bajará la moral y la pilila. También hay otros asuntos que tener en cuenta de capítulos anteriores y que conviene repasar: aquí y aquí.

Una advertencia esencial: ten en cuenta que normalmente a las mujeres les molesta que les toquen el clítoris directamente cuando aún no están muy excitadas. Esto no es una regla general, pues depende de que ya hayas o no conseguido atrapar su mente a voluntad y de que seas o no capaz de aplicar una firme intención en lo que vas a hacer; es decir, que si lo tocas prematuramente por torpeza, la cagaste Burt Lancaster, como dicen los Hombres G (lo siento, no he encontrado el vídeo de la canción); pero si lo haces con la intención concreta de atrapar su mente y con la técnica adecuada, conseguirás rendirla a tu dirección artística.

Que ella escuche tus ronroneos o el sonido húmedo de tu lengua por sus abajos contribuirá a atrapar su mente más eficazmente porque estás produciendo la activación de dos áreas: sensitiva y auditiva. Tampoco hace falta que te pongas a dar un concierto ¿eh? Todo en su justa medida.
Puede ser recomendable empezar por las ingles, incluso por los muslos antes de llegar a ellas para ir cogiendo temperatura, pero cuando consigas dominar la técnica podrás empezar por donde consideres en cada ocasión, en función del momento, la excitación, etc., incluso directamente sobre el clítoris y con una presión fuerte.


TOQUES EN LA VULVA: Se aplican a toda el área genital femenina, fundamentalmente a la parte más externa: los labios mayores.

- El hipopótamo: Se trata de abarcar toda la vulva con la boca. Es un buen toque para empezar porque evitas tocar el clítoris directamente, pero sirve para cualquier momento. Mueve sus gitanales con tu boca como si estuvieses amasando o comiéndote una gran bola de helado blandito, cambia de posiciones.
- El tiburón: Es como el hipopótamo, pero con dientes ;-) No sé si a todas las mujeres les gusta, pero a algunas sí. Que muerdas (¿Te advierto que con control o ya lo has supuesto, Einstein?) cambiando de lugar, transversalmente, longitudinalmente; también en la zona base del clítoris (cogiendo mucho cacho carne, no se te ocurra morderle la pepitilla o te atizará un guantazo) incluso la zona donde se asienta el vello púbico. Puede gustarle mucho, sobre todo si los ánimos anticipan un kiki “fuerte”, de los de macho posesivo y mujer poseída.
- La brisa: Consiste en soplar suavemente. Es una técnica muy útil para los intermedios entre toque y toque o para kikis sensibles (de esos que algunas se empeñan en asimilar al amor). Especialmente útil para refrigerar sin enfriar o para incrementar su sensibilidad. Vale para los labios menores y vagina.
- Pepe Pótamo: Consiste en aplicar hiposoplidos huracanados, fríos (poniendo la boca como para silbar) o cálidos (con la boca abierta, como echándole el aliento). Muy útiles para calentar, para incrementar su sensibilidad a los contrastes y para enfriar, especialmente en verano, cuando tiene la almeja a la marinera de tanto metesaca, o cuando de repente un día pillas el truco a la Cienorgasmología y le metes 100 goles sin casi sacarla mientras ella no da crédito a lo que está pasando. En casos extremos un poco de agua fresca, una lata fría de cocacola (ponerle la lata, no echarle encima la cocacola, animal) o un abanico tampoco vienen mal ;-) Vale también para los labios menores y vagina.
- El ñoño: Consiste en dar suaves besos por toda la zona. Pon intención, o pensará que eres un adolescente primerizo y blandengue agradecido por sus favores y que tu libro favorito es El Principito. Es decir, proyecta “energía mental” activamente, no la absorbas a lo vampiro.
- El zalamero: Aplicar la lengua como si estuvieras dando lenguetadas a una gran piruleta, por donde percibas que tienes que hacerlo.
- El mamón: Lo conseguiremos atrapando con tus labios cualquier parte de o toda la vulva y succionando como si mamáramos. Igual que en el caso del ñoño, ten en cuenta que como se te ocurra volver a la infancia te perderá el respeto para siempre ;-)
- La pedorreta: No te rías, no, jejeje, que va en serio. Se trata de hacerle pedorretas con la boca rozando levemente su piel para hacerle unas agradables cosquillas. Es muy importante mirarla con seguridad al hacerlo (si la postura te lo permite), o creerá que estás haciendo el ganso y se te escapará su mente, incluso puedes levantar la cabeza para ver si su respuesta es la que buscas o la has pifiado. También pueden hacerse más bestias si la ocasión lo permite, por ejemplo si hay risas y tal y cual.
- El jeta: frota toda tu cara contra toda la zona, nariz incluida. Ten cuidado si tienes la barba de tres días dura como un cepillo de alambre o le harás un doloroso peeling que le dejará el territorio escocido un par de días.


TOQUES EN LA VAGINA (Puedes separarle o no los labios mayores)

- El oso hormiguero: Consiste en introducir la lengua en la vagina como hace el plantígrado, pero en lugar de buscar hormigas, tú busca el fondo. No vas a conseguir nada por tener la lengua más larga, lo que está sintiendo la mujer es todo tu morro apretándole la vagina y la vulva, así que mueve la lengua con intención, pero mueve los hocicos también como un cerdo hozando en busca de una trufa.
- El alfarero: Ve metiendo progresivamente la lengua en su agujerito haciendo círculos como si fueses un alfarero haciendo la boca de un vaso de arcilla, o como si fuese tragada por un remolino, desde afuera hacia adentro. La velocidad e intensidad dependen del momento que quieras crear. Puedes ir de fuera adentro y de dentro afuera, pero como siempre, no maquinalmente.
- El puñetero: Pásale largamente la lengua por un lado de la entrada a la vagina, ella pensará que el siguiente lenguetazo irá al mismo sitio, así que haz una pausa y cambia de lado.


TOQUES EN EL CLÍTORIS

- El golosón: aplica toda la lengua, no la punta, a los lados del clítoris, a un lado y al otro, a la raíz y a la parte opuesta. No siempre del mismo lado, no repitas mecánicamente.
- El pornstar o clásico: Ya lo sabes, sacas la lengua y le das caña por donde quieras hacerlo.
- El finolis: Si eres de los exquisitos que sólo quieren lo mejor, descubre el clítoris apartando su prepucio con dos dedos y pásale la lengua suavemente. Si no está muy excitada, a ella le dará un calambre y ella a ti otro guantazo. También puedes aplicar aquí La Brisa.
- El pez grande o pezón: Trátalo como si fuese un pezón, chúpalo como si estuvieses mamando de la teta. Le puedes hacer un orgasmazo increíble sólo con ésta técnica, pero que no sea el primero.
- El desdentao: Muérdelo suavemente protegiendo tus dientes con los labios.

La mayoría de estos toques se pueden combinar con toques digitales libres particularmente introduciendo uno o dos dedos en su vagina para estimular el punto G (no tiene nada que ver con los Hombres G, ¿eh?), que no es otra cosa que parte de la rama que inerva la sínfisis del pubis procedente del mismo nervio (nervio pudendo) que inerva el clítoris (nervio clitorídeo) en la pared anterior de la vagina (¡Tanto misterio y tanta leche, hombre!).

Con este exhaustivo pero no absoluto repertorio podrás hacer maravillas; combina los toques como te parezca que debes hacerlo en cada momento, las intensidades, las pausas, los ritmos... Y en el próximo capítulo veremos ejemplos concretos de conciertos orales.




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Respuesta sexual humana y toques femeninos



En primer lugar quiero recalcar que desde los hindúes por lo menos, se sabe que la mujer posee una disposición erótica mucho mayor y su placer en las relaciones sexuales es superior al de los hombres. Pero también es cierto que unos y otras tienen un papel diferente, porque —según el kamasutra— los hombres son los actores mientras que las mujeres son las personas sobre las que se actúa, manteniendo sus naturalezas individuales, claro está. Hasta aquí todo bien, todos estamos de acuerdo ¿no?


Yo voy a jugar con la clasificación de la Respuesta Sexual Humana de unos señores que se dedicaron a estudiar las disfunciones sexuales a eso de 1970, Masters y Johnsons. Según ellos, este proceso se divide en 5 fases en función de los cambios que se producen en el organismo ante un estímulo sexual efectivo:


1ª Fase: De excitación


Es el primer contacto con un estímulo sexual efectivo, empiezan los cambios físicos, la tensión sexual aumenta rápidamente en el tiempo...

Toques femeninos: aparecer con lencería, desnuda esperándolo... aquí puede decirse que actúan los sentidos... sobre todo las vista... pero OJO! Un estímulo intenso sin connotación sexual (ruidos, dolor, luz,...) pueden hacer que se pierda el nivel de tensión logrado y, por tanto, interrumpir o abortar el proceso. Aquí también incluyo ver juntos fotos eróticas, ver porno, pero también... los mordiscos, los abrazos, los besos en las zonas estratégicas (de cada uno), los mimos.... todo ese universo erótico que puede haber en una pareja ;).


2ª Fase: Meseta


Aquí la tensión sexual no suele aumentar mucho más, se producen la mayoría de los cambios fisiológicos en un proceso que se hace llamar "maduración hacia el orgasmo", dado que su intensidad y grado de satisfacción dependen en gran parte de esta fase.

Toques femeninos: En esta fase yo clasificaría la felación y que nos chupen el chocho, pero no estoy segura. Más que nada es como una preparación para el orgasmo, nosotras nos lubricamos y en ellos empiezan a revolverse los espermatozoides, por así decirlo...;)


3ª Fase: Orgásmica


Constituye la liberación brusca de un alto grado de tensión sexual. Su duración es de las menos variables en la Respuesta Sexual Humana de M&J, entre 3 y 10 segundos. Suele ser algo más prolongado en la mujer que en el hombre. En esta fase es cuando se produce la eyaculación en el hombre. Aquí es donde supongo yo q se deben aplicar los toques del maestro para el autocontrol para q el hombre no libere tanta tensión sexual y la mujer sí.

¿Toques femeninos aquí? Eso sería a debatir. Yo desde luego creo que si con mi cara de felicidad les vale eso ya se considera un toque ¿no?




4ª Fase: Resolución


Sigue inmediatamente al orgasmo con una pérdida rápida de la tensión sexual. Los cambios fisiológicos antes acontecidos empiezan a desaparecer, siempre en orden inverso a su presentación. Por ejemplo, si el rubor facial aparece al final de la fase de meseta, desaparecerá pronto en la resolución. En esta fase femenina Maestro aún se autocontrola como un campeón, es decir, sospecho que anda en la fase de meseta hasta que las mujeres ya pasamos por todas las fases esas cien veces que presume ;)).


En el caso del Maestro, tengo entendido que le vale con nuestra cara. Bueno, pues en su cara de demonio que dicen que pone, nosotras nos cercioraremos de que mire bien a una bruja muy mala, o pondremos la cara que a él le gusta. Pero siempre a los ojos (si es que se puede). En el caso de que sea a la inversa, que tengamos nosotras que aumentar de nuevo la tensión sexual un toque ideal de la muerte es alejarse para volver a acercarse sensualmente, hacer un striptis de esos, cambiar de postura... no sé, lo que se os ocurra; chicas, como si os coge en brazos y acabáis en los sitios más insospechados haciéndolo... hay miles de toques... pero la intensidad depende del cansancio de la otra persona.


5ª Fase: Período refractario


Es el período de tiempo durante el cual la presencia de un estímulo efectivo no puede iniciar un nuevo ciclo de respuesta sexual. Su duración es extremadamente variable, pero en la mujer NO EXISTE. Esto no quiere decir que la mayoría de las respuestas orgásmicas femeninas contengan más de una experiencia orgásmica sino que fisiológicamente es posible ;)). En esta fase pueden venir las risas, el buen humor, el hablar de guarradas, tipo fantasías sexuales... una cosa lleva a la otra y tal....

Es la fase en la que los hombres dicen "mmmm, ya toy" y las mujeres decimos a veces "¿Yaaaaaaa?" y tonces tenemos que introducir algunos toques verbales del tipo "Machote, sigue sigue sigue, no pares.... etc., etc., etc.".

¿Que no son efectivos? bueno, paramos, les hacemos ver que los dejamos descansar y cuando menos se lo esperan..... ¡ZACA! !!Ropa interior nueva, postura nueva, batuta femenina al podeeeeeeeeeeer!!


Bien, yo lo dejo aquí. Mis amigas con esto y con el libro de la Tracey Cox, son felices, además si no se les ocurre a ellas algo nuevo se me ocurre a mí. La Cox lo que propone son ideas sencillas, pero también importantes, como lo de ver pelis eróticas, fotos, leer libros sexys... y lo de las diferentes formas de chupar está genial eh? (no pienso publicarlo aquí, os compráis el libro).


Mujeres!! Más toques y escribimos otro libro ;)



Nota del editor: Yo no he intervenido en este post excepto en la corrección ortográfica y algo en el estilo. Como se suele decir, no me hago responsable de las opiniones expresadas por los colaboradores de este Blog; así que los comentarios, a su autora, nuestra querida Traserete ;-)



Acompasarte con sus sensaciones en el sexo oral

imageYa hemos comentado alguna vez que la postura del misionero permitió un salto evolutivo enorme a la humanidad, porque puso la semilla de la relativa igualdad entre varones y mujeres. Gracias a la denostada postura, la mujer dejó de ser un mero objeto de la satisfacción sexual masculina vuelta de espaldas a cuatro patas como los animales y pasó a transmitir con sus expresiones faciales aquello que sentía, lo que obligó al varón a tenerla en cuenta precisamente por la imposición de la empatía sobre él, de modo que espejeaba sus expresiones de placer, indiferencia, despiste, dolor, desagrado… Las sentía en sí mismo. La Cienorgasmología, también lo hemos dicho ya, supone el siguiente salto evolutivo, pues obliga al varón a autocontrolarse y dedicarse de lleno al placer de su mujer antes que al suyo.

¡¡¡Soy el puto amo!!!! Entrevistamos al primer graduado en Cienorgasmología

¿O no?



Primera entrevista al también primer practicante avanzado de la Cienorgasmología.
En exclusiva mundial y más, para nuestros queridos lectores,
el relato de su paso de la normalidad a la supranormalidad ¡¡en sólo un mes!!.



P: Háblanos de la postura Cienorgásana. ¿Qué ventajas e inconvenientes tiene a tu juicio respecto a otras posturas?

R: Es una postura que permite una gran amplitud de movimientos caderiles y pélvicos, depende de lo que tu propia pelvis te pida.

¿Inconvenientes? Ciertamente hay que estar en forma porque es una postura bastante más “cansina” (perdónenme la expresión) que cualquier otra al principio.

P: Ya nos has dicho que el sofá ha sido un descubrimiento valioso ¿por qué? ¿Qué ventajas e inconvenientes tiene respecto a otras ubicaciones?

R: En el sofá fue espectacular. En un sofá grande y cómodo como el de mi casa puedes estar en Cienorgásana todo el tiempo, lo cual permite cierto descanso físico ;). Para mí es la mejor ubicación, no le encuentro inconvenientes.

P: ¿Qué es lo que más esfuerzo te cuesta, atrapar tu mente o la suya?

R: La mía, claramente, es más difícil controlarse uno mismo que a ella.

P: ¿Se ha incrementado la duración de vuestros encuentros desde que aplicas técnicas de Cienorgasmología?

R: Por supuesto... bastante más largos

P: ¿La intensidad o duración de tus orgasmos se ha modificado?

R: Sí, algunos son algo más largos e intensos.

P: ¿Has utilizado toques pélvicos? ¿Cuáles?

R: Los he mezclado todos, he usado cada uno en ellos en el momento preciso. Físico-verbal-verbal-pélvico, pero también tu famoso TaAaam....ya me entiendes. Es una imagen que tengo del TAaaam... Asúmelo como una nueva forma de verlo, cada letra grande de la samba va acompañada de un toque, cada letra pequeña por otro. Si combinas uno verbal con un pélvico el resultado puede ser un orgasmo espectacular siendo la" T" el verbal, la "A" unos empujes fuertes, la "a" otro verbal, otra "a" uno caderil más suave.... y así... He asumido tu ciencia de una forma un poco rara, lo sé, pero funciona!.


P: ¿Has utilizado toques verbales? ¿Cuáles?

R: Sí, los que se me iban ocurriendo, siempre en la línea de los tuyos, más menos. Obviamente, no me los iba a estudiar. Los toques verbales salen por sí mismos si conoces la orquesta mental femenina (de cada mujer).

P: ¿Has utilizado toques manuales? ¿Cuáles?

R: Sí, pero ninguno de los que propones. Sobre todo el de masajear el trasero, muy efectivo en tanto en cuanto encuentres el momento adecuado. Al principio pensaba que igual le había hecho daño porque los masajes eran con fuerza, pero, al parecer, ella no lo experimentó como dolor, sino como masaje muscular “relajante” de los glúteos y de los músculos pélvicos. ¿Curioso, verdad?

P: Supongo que has conseguido atrapar su mente y marcar sus ritmos con ellos ¿has percibido claramente que manejas sus orgasmos a tu voluntad?

R: A mi voluntad no exactamente. Pero conseguí tener varios orgasmos a la vez q ella ;). Como ves.... no dejo mi gran orgasmo para el final, como tú, sino que prefiero tener pocos pero con la máxima calidad ;). No exactamente significa que perdí la batuta de mi orquesta en algún momento, es muy difícil autocontrolarse tanto tiempo. Conseguí que muchos de sus orgasmos fuesen a mi voluntad, pero otros no, porque cogió ella la batuta y esos pocos orgasmos fueron bajo su voluntad, no la mía. Por eso es tan difícil la Cienorgasmología, porque es muy difícil dirigir la orquesta si el violín principal va por otro lado. O sea, para que me entiendas, el que ella no haga nada es sumamente difícil.

P: ¿Has conseguido, pretendiéndolo, encadenarle varios orgasmos sin pausa entre ambos? (Aún no hemos hablado de este tema en el Blog)

R: Sí, lo he conseguido pretendiéndolo y sin pretenderlo ;).

P: ¿Has conseguido, pretendiéndolo, alargarle algún orgasmo significativamente más de lo habitual? (Id.)

R: Sí, pero eso ya sabía hacerlo, no necesité ninguno de tus consejos ;). Un Taaaammmmm suavísimo por ejemplo a la vez que una lenta caricia, un toque físico muuuuuy suave. Imagínate que mientras la penetras suavemente le mojas la zona clitorídea y la masajeas con habilidad, por ejemplo, en el mismo momento en que veas a la nena en el clímax, el clítoris está aún más sensible y ese orgasmo potenciado puede ser espectacular. Hay muchas formas de hacerlo, yo lo hago así porque hace de mi novia una máquina del orgasmo, tiembla ella, tiembla la cama, tiembla todo el suelo si hace falta....y no te digo nada si se lo hago mientras la penetro por detrás... considero eso un toque físico para controlar su orgasmo porque es una forma de potenciarlo rápidamente. Haciéndolo así diferentes variedades del TaaaAaMM ese, le encadené 12 orgasmos seguidos, y en esos 12 conseguí un autocontrol increíble, me sentí orgulloso de mi mismo ;;))).




Capítulo 5 - Atrapar su Mente: Conviértete en director de la orquesta de tu mujer


Deja que acuda a tu mente la imagen de un gran director de orquesta. Un maestro como Karajan capaz de organizar y dirigir un gran número de personas y complejos instrumentos, de los que extrae su fruto mediante un sutil lenguaje corporal: postural, gestual, y particularmente sus manos y su batuta, sintiendo nítidamente cada matiz de la música que está produciendo. ¿Resultado? Un feedback recíproco: la orquesta se ve reflejada en los movimientos del director y él siente el reflejo de su propia actuación sobre en ella a través de la música. Una sinfonía armónica que lleva a los que la escuchan a experimentar y gozar de las sensaciones y sentimientos que el autor de la partitura quiso transmitir cuando la creó.

Sin embargo, la actuación de la mayoría de los actores sexuales se parece más al bueno de Angus Young y su guitarra, o a este lumbreras anónimo, reproduciendo ritmos arrítmicos y cadencias monocordes, tan útiles para crear una melodía armónica como el aserrar de un carpintero. Atrofiada su capacidad de sentir la música a base de ruido y mucho menos capaces de transmitir sensaciones sutiles, cambios de tempo, de intensidad, de frecuencia, pausas y movimientos a su orquesta, poco placer pueden provocar en cuanto la pasión inicial del matrimonio decae. Son los que se basan en su experiencia con la zambomba masturbatoria arriba-abajo, como el papel higiénico, y frotar hasta acabar. Éstos pueden terminar produciendo algún sonido parecido a música, cierto, pero más por que existen instrumentos capaces de sonar aceptablemente sin dirección externa que por su habilidad inexistente. Tanto la buena música como las obras de arte quedan fuera de su alcance. A estos es mejor que sea la mujer quien les dirija. O como suele suceder, que cada uno vaya a lo suyo. Pero hacen el amor ¿eh?. Patético.

En el lado contrario, un maestro de la Cienorgasmología conoce a la perfección los instrumentos que componen la orquesta que va a dirigir, sabe cuál es el timbre, tono, volumen, tempo, sensibilidad... y umbral de saturación de las diferentes partes del cuerpo de su mujer. Un aprendiz o un mal director se dedica a buscar misteriosos puntos G que puedan producir algún sonido decente o ni eso, se queda con la búsqueda de su propia satisfacción mientras descuida instrumentos esenciales y su propio desarrollo. Para alcanzar la maestría es necesario prestar atención a la partitura que queremos interpretar, una pieza variada en intensidades y con pocos estribillos repetitivos, y a los instrumentos de que disponemos.



Vamos a verlos. Los toques con la pelvis que ya anticipamos en el anterior capítulo deben ser ahora manejados, pero en ausencia de imágenes ejemplificadoras por razones obvias, habrá que recurrir a descripciones con terminología más o menos ortodoxa. Para transmitíroslo sin recurrir a vídeos, voy a representarme mentalmente a mí mismo dirigiendo una obra concreta con una orquesta y describirlos lo que hago, cómo lo hago y lo que escucho. Tened en cuenta que esto no es una regla matemática, sólo una posibilidad entre muchas. Una advertencia previa: teatralizar es igual a no sentir, a fingir, a mentir, a exagerar... de modo que sé auténtico en lo que sientes. Si no sientes aún nada, ten paciencia, poco a poco empezarás a sentir la música que diriges y con un poco más de tiempo también llegarás a ser un maestro. La satisfacción que te proporcionarán los aplausos al final compensarán de sobra el trabajo.



TOQUES NATURALES DE BATUTA PÉLVICA

- Colócate en cienorgásana entre sus piernas. Entra en su cuerpo, pero no lo hagas ni como si estuvieras aparcando el coche ni tampoco como si fuese la escena de la película más ñoña que hayas visto. Sé natural, el momento te dirá cómo de rápido o de intenso. Siente, y sobre todo siente lo que ella siente.

- Un par o tres de empujones lentos, intensos, profundos y conscientes más para darle tiempo a que disfrute la sensación... y cuando toque salir retrocede sólo un centímetro o menos y vuelve a empujar, describiendo a la vez con tu pelvis un amplio semicírculo de lado a lado que frote pubis contra pubis. Es oportuno aprovechar la intensidad del momento para que ese arco sea profundo, que mueva todo su cuerpo con tu empuje. Ella sentirá una ola que sobrepasará los límites de su cuerpo y llegará hasta su cabeza. Muchas sensaciones. Y sorpresa. Retírate.

- Repítelo igual, consciente. Empieza por los dos o tres impulsos rectos y termina por la salida semicircular pero en el sentido inverso; no copies la profundidad del primer empuje, haz primero uno superficial o en dos etapas con parada intermedia para romperle el ritmo y capturar su atención mientras ella se pregunta: “¿qué va a hacer ahora? ¿qué está pasando?” Y tú lo estás viendo en su cara.

- Puedes repetir el movimiento, pero ella en ese momento ya se espera que lo hagas otra vez y empezaría a poder desconectar su mente de lo que le haces, así que aprovecha la oportunidad: rómpele el ritmo empezando con un pequeño arco y vuelve por donde viniste. Al llegar al final del arco... ¡sal!

- Quédate un momento sólo con la punta dentro, un instante que vuelva a capturar su atención expectante por lo que viene a continuación.

- Toca con una mano sus costillas flotantes e inmediatamente, justo cuando se pregunte qué estás haciendo... vuelve a entrar empujando y cuando llegues hasta el fondo no pares, elévate de modo que aplastes la base de tu cola contra su clítoris y sácala manteniendo la presión fuerte sobre él.

- Vuelve a entrar sin modificar la posición, con lo que volverás a frotar toda tu cola contra su clítoris en sentido inverso.

- Repítelo dos veces más, pero en la última, cuando llegues al fondo... sal describiendo otra vez un arco de circunferencia similar a los anteriores.

- Ahora no vuelvas por donde has venido, porque eso es lo que ella espera, así que continúa la circunferencia en el mismo sentido para sorprenderla.

- Vuelve a hacer otra circunferencia completa más mientras observas su expresión.

- Sal, ella ahora espera que sigas con intensidad, así que rompe su dinámica mental con un par de mete-sacas rápidos y superficiales.

- Para. Muévete muy despacio. Observa.


Ahora tienes que empezar a trabajar con la intensidad y el tempo, porque ella está esperando más, está totalmente entregada, sorprendida, en tus manos, así que ahora toca pasar de andante a allegro vivace y al definitivo allegro molto vivace progresivamente...


- Toca. Mírala. Sonríe. Pregunta ¿quieres más? No esperes a la respuesta.

- Di: “toma”, “más”, “vamos”, “siente”, “disfruta” o algo así para centrar su mente en el objetivo. Acércate más a ella y pega tu cuerpo al suyo mientras empujas profundo.

- Empuja tres o cuatro veces profundo y apretándote contra su pubis en cada final. Cambia.

- Sepárate. Empuja en semicírculo más rápido que antes pero igual de profundo ¿te sigue?

- Empuja tres o cuatro veces ¿te sigue? Continúa un par de veces más. ¿No te sigue? Para un instante... Toca. Sonríe con expresión de control. Di ¿Qué haces?. No esperes respuesta.

- Separa tu cuerpo del de ella y empuja en semicírculo en sentido inverso ¿Te sigue ya?

- Acelera los empujes ahora rectos. ¿Te sigue? ¿Sí? Pues sigue. Sigue, sigue... ya la tienes...


Si todo ha ido como yo imagino a estas alturas ya la has llevado a las puertas del primer orgasmo, así que sigue sin parar al ritmo de su respiración, armonizándote con lo que le haces sentir hasta el final. Ni se te ocurra pensar en dejarte arrastrar por ella, estás centrado en ella, y si este orgasmo se lo has hecho en cinco minutos, no la vas a dejar así. De modo que concéntrate en ella y en sus movimientos para olvidarte de ti.

Bien, si lo has conseguido, ya has dado el primer paso para alcanzar la maestría en la Cienorgasmología. Dentro de un mes, le harás un orgasmo nada más entrar en ella, en el primer empujón. ¿Es posible? Claro, ella ya se ha descondicionado del mete-saca, frota-frota hasta acabar, y ahora sabe que lo que le espera es una incógnita, un nuevo y quizá diferente océano de placer que le inunde, ya no tiene dudas, está entregada a ti y a lo que quieras hacerle, porque sabe que sabes.

Puedes probar otras combinaciones de toques, toques verbales y toques de pelvis, esto no ha sido más que un ejemplo redactado a vuelapluma y apenas revisado. En próximos capítulos os daré más claves para que podáis meter cien orgasmos en una hora, encadenárselos y alargárselos.





Capítulo 8 - Atrapar su mente: El Orgasmo de la Mujer 1

Seguro que los que ya habéis alcanzado un buen nivel cienorgasmológico, como El Cienorgásmico con sus más de cincuenta y más recientemente Messi y sus treinta golazos, habéis empezado ya a controlar los orgasmos de vuestra mujer; incluso muchos ya habíais logrado modularlos espontáneamente antes de conocer la Cienorgasmología. Algunos sin embargo puede que aún no sepan que pueden hacer virguerías con ellos.

Una mujer no va a protestar si le hacéis cien orgasmos más o menos iguales en una sesión, os lo aseguro. Más que nada porque aun no prestándoles atención, el Caos pone a funcionar su compleja maquinaria produciendo las variaciones necesarias para que haya una infinidad de diferencias dependientes de varios factores y su combinación:

· La postura adoptada por la mujer.

· La vía: clitorídea, vaginal, anal u otras localizaciones y sus combinaciones.

· El momento del encuentro sexual: si se acaba de empezar la sesión, si es un momento intermedio, si es al final, si después de un cambio de vía...

· El momento del ciclo menstrual: si está menstruando, si ovulando, si antes o después de cada una de estas fases, si en fases intermedias...

· Su excitación previa y durante el encuentro...

· De ti mismo: posturas, toques de todo tipo, profundidad de la penetración, excitación...


Pero aun teniendo al Caos como aliado, no está de más dejarle menos responsabilidad y seguir desarrollando nuestra habilidad asumiendo un papel más activo en los orgasmos femeninos. Pero... ¿para qué modularlos si ella ya disfruta como una bellaca? Si aún no has visto a tu mujer disfrutar hasta el punto de eyacular a chorros o tener un orgasmo salvaje de un minuto aún no has visto más que la punta del iceberg.

Y ¿qué podemos hacer para conseguirlo? ¿Cómo podemos modular sus orgasmos? En este post responderemos únicamente a esta última pregunta –no vayamos a crear algún problemilla por no advertir los riesgos que os fastidien la noche- y dejaremos para el siguiente la descripción de todas las posibilidades de actuación.

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Podemos modular los orgasmos femeninos igual que modulamos el camino hacia ellos, a través de los distintos tipos de toques –manuales, pélvicos, verbales, rítmicos...-, pero obviamente en un orgasmo tenemos menos margen de tiempo para introducir variaciones, por lo que hay que ser aún más sutil y aceptar otorgar la cuasi exclusiva a los toques pélvicos. 

Recordad que sois directores de orquesta aplicando creativas variaciones personales -improvisadas o no- a una partitura que casi todos los demás interpretan de forma similar: raca-raca-raca..., y en la que prácticamente lo único que varía es el escenario musical: cama, sofá, coche, mesa, suelo, cocina, mañana, siesta, noche, con cachivaches sexuales, pelis... 

De modo que lo primero es plantearos qué efecto queréis conseguir en cada uno de sus orgasmos y dónde le vais a hincar el diente a cada uno.

Cuando digo cada uno soy consciente de que es excesivo, en realidad os recomiendo no pretender modularlos todos, porque hacerlo puede generar alguna frustración en vuestra mujer. Conviene dejar que alguno de ellos vaya al azar, que sea totalmente libre y espontáneo, al ritmo e intensidad que percibáis en ella. Así contribuís aún más a la variación. ¡Ah el divino Caos!, sin él no existiría la vida. Empezad por practicar sólo con uno o dos de cada diez de sus orgasmos, por ejemplo.

Estas son las advertencias que conviene tener en cuenta:

· Modificar un orgasmo implica un significativo riesgo de frustrarlo, en un instante podéis hacer que lo pierda; y aunque inmediatamente le hagáis otro, esta no es una de las experiencias favoritas para la mujer. Alguna vez os habrá pasado a vosotros con vuestros propios orgasmos, así que ya entendéis de lo que os hablo.

· Conviene a principio empezar modificando sólo el inicio del orgasmo, no su transcurso, y mantener aproximadamente la variación inicial durante todo su desarrollo. Ya comprenderéis en unos post más adelante por qué os digo esto. Más misterio.

· No debéis cambiar de forma abrupta el ritmo y la intensidad entre los momentos anteriores al orgasmo y el orgasmo propiamente dicho si no sois practicantes avanzados de la Cienorgasmología y estáis totalmente seguros de que controláis la situación y vais a mantener atrapada su mente.


Empezad por modular orgasmos que no coincidan con el vuestro, porque durante éste los hombres tendemos naturalmente a centrarnos en nosotros mismos y dar rienda suelta a nuestro placer, por lo que pensar demasiado en el suyo puede disminuir el nuestro y resultar nosotros frustrados y con menos posibilidades de repetir que ellas por aquello del periodo refractario (del que también hablaremos en post venideros). A la mujer normalmente le encanta sentir que nos corremos, así que si coincidimos con uno de ella, su placer está garantizado.